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Pesaj



Leyes de Pésaj

Durante los ocho días de Pésaj, sólo se puede comer pan ázimo (Matzá), conmemorando así la salida de Egipto que, al ser tan precipitada, no dio tiempo a los judíos para esperar que el pan fermentara.

No solamente está prohibido ingerir Jametz durante Pésaj sino incluso su simple posesión está prohibida, por lo que debemos despojarnos de cualquier alimento Jametz antes de la víspera de la fiesta.

"Jametz": Se denomina Jametz a toda sustancia fermentada, procedente de los cinco cereales principales: Trigo, cebada, espelta, avena y centeno. Según la Halajá (Ley Judía) la fermentación se produce al contacto del agua con estos cereales, al cabo de dieciocho minutos en condiciones normales.

Alimentos Jametz son, por ejemplo: Pan, fideos, galletas, cerveza, whisky, etc.

La prohibición del Jametz incluye también otras categorías:

"Seor": Levadura y todo agente fermentante.

"Taarobet Jametz": Cualquier comestible que contenga, aún en una mínima proporción, algún ingrediente Jametz.

El arroz, el maíz, los garbanzos, las legumbres en general, y otros cereales que no pertenecen a las cinco especies, no se consideran Jametz. Aún así, las comunidades ashkenazíes acostumbran a privarse de ellos; También algunas comunidades del Norte de África tienen por costumbre privarse del arroz, temiendo no poder revisarlo como corresponde de granos de cereales con los cuales viene generalmente mezclado.

"Jametz no comestible": Todos los productos no comestibles adquiridos antes de Pésaj, aún si contienen derivados del Jametz (tintas, pomadas para zapatos, goma de pegar, etc.), se pueden usar debido, precisamente, a que no son comestibles, como tampoco lo son los cosméticos, el jabón, los perfumes, etc. Todos estos productos cosméticos están permitidos, excepto aquellos artículos de sabor agradable, en especial los de uso bucal, como el dentífrico o los lápices labiales, los cuales no se deben utilizar hasta estar seguros de que no poseen ningún ingrediente Jametz en sus fórmulas.

Los medicamentos de consumo oral, como las pastillas, jarabes, sacarina, etc., no se pueden ingerir hasta estar seguros que no poseen ningún ingrediente Jametz, debido que en la elaboración de muchos de ellos -en especial las pastillas- se usa el almidón de trigo como solidificador. En caso de gravedad, obviamente, se puede tomar cualquier medicamento (en estos casos, se recomienda consultar con el Rabino de la comunidad).

"Alimentos no Jametz": Es imposible detallar una lista de alimentos permitidos, ya que la elaboración de los mismos varía de lugar en lugar, de tiempo en tiempo y de firma en firma. Tomemos, como ilustración, el café, que normalmente está permitido pues no posee ningún tipo de Jametz, pero que en algunos países, viene mezclado con granos de cebada, que es Jametz, absoluto (Gamur), por lo que se debe consultar con el Rabino de cada comunidad, con respecto a cada caso en particular.

"Hagalat Kelim": Los utensilios que usamos durante todo el aņo para Jametz no deben ser utilizados desde la víspera de Pésaj, hasta finalizada la Fiesta; se los limpia bien y se los guarda en un lugar cerrado. Hoy en día está al alcance de casi todos proveerse una vajilla especial para Pésaj. Sin embargo, para aquellos que no les sea posible, podrán usar la vajilla normal luego del proceso de la Hagalá (escaldadura), excepto los utensilios de porcelana o cerámica que no son susceptibles de escaldar ("Kelí Jeres").

Debido a que son múltiples los casos y los detalles, así como las costumbres sobre este procedimiento, aconsejamos consultar a la autoridad rabínica de la comunidad.

"Bedicát Jametz": Con anterioridad a la víspera de Pésaj se debe limpiar a fondo toda la casa de manera que no quede jametz en nuestra propiedad.

En la noche entre el 13 y el 14 de Nisán, aproximadamente veinte minutos después de la puesta del sol, se realiza la Bedicá, o sea, la búsqueda minuciosa de los restos de jametz que pudieron haber quedado en nuestras propiedades (casa, negocio, automóvil, etc.).

Debemos revisar todas las habitaciones, rincón por rincón, y especialmente la despensa, el refrigerador, y aquellas alacenas donde normalmente guardamos alimentos jametz.

La búsqueda se realiza a la luz de la vela de cera o parafina, debido a que la pequeña luminosidad de la vela nos obliga a comprobar con minuciosidad, lo que permite revisar grietas o rendijas, o lugares donde la luz eléctrica no llega.

Se acostumbra a ocultar diez trocitos de pan bien envueltos en papel para incentivar a quien realiza la Bedicá y se esmere en la búsqueda.

Antes de la Bedicá, se dice la siguiente bendición:

"BARUJ ATÁ A-DO-NAY E-LO-HE-UN MELEJ HAOLAM ASHER KIDESHANU VEMITZVOTAV VETZIVANU AL BI'UR JAMETZ".

"BENDITO ERES TU, DI-S NUESTRO, REY DEL UNIVERSO, QUIEN NOS HA CONSAGRADO CON SUS PRECEPTOS, Y NOS HA ORDENADO LA ELIMINACIÓN DEL JAMETZ".

A continuación, sin hablar, comenzará la búsqueda. Una sola bendición es suficiente para la revisación de varias propiedades.

"Bitul": Finalizada la Bedicá se realizará la anulación (Bitul) del jametz que no se encontró, pronunciando la siguiente fórmula: "Toda levadura y sustancia fermentada que se halla en mi propiedad, que no he visto ni he eliminado, sea anulada y considerada como polvo de la tierra".

Luego se guardará el jametz que se encontró hasta la mañana siguiente y se dispondrá de un lugar adecuado para la cena de esa noche y el desayuno del día siguiente, cuidando no esparcir migas de pan o de galletas para que no sea necesario revisar nuevamente.

"Bi'ur jametz": Después del desayuno se acostumbra a quemar el jametz que sobró (o también se lo puede tirar al río o por el desagüe), junto con el que encontramos la noche anterior en la Bedicá, en recuerdo de los restos sobrantes de los sacrificios que debían ser quemados una vez pasado su tiempo.

Finalmente, se debe pronunciar, como en la noche anterior, la anulación (Bitul) de manera más detallada: "Toda levadura y sustancia fermentada, que vi o que no vi, que eliminé o que no eliminé, sea anulada y considerada como polvo de la tierra".

De esta manera damos a entender que aunque pueda quedar algo de jametz, ya no nos pertenece pues no estamos interesados en él.

"Mejirat jametz": Los alimentos jametz que no deseamos eliminar, se podrán vender a u no judío, y puede comprarse nuevamente finalizada la festividad. Esta operación comercial se realiza individual y directamente o, por lo general, a través del Rabinato de cada comunidad.

"Horarios": Se puede comer jametz sólo hasta la cuarta hora-solar del día; durante la quinta hora-solar no se puede comer, pero todavía lo podemos eliminar (Bi'ur), vender (Mejirá), o anular (Bitul). A partir del comienzo de la sexta hora-solar, toda actividad relacionada con jametz queda prohibida hasta la finalización del Pésaj.

"Ajilat Matzá": Durante la víspera de Pésaj, se acostumbra a no comer Matzá hasta el momento del Séder, para demostrar la diferencia entre lo permitido y lo obligatorio, y cumplir el precepto de comerla con deseo y apetito.

"Taanit Bejorot": Los primogénitos acostumbran a ayunar en la víspera de Pésaj, en recuerdo a la plaga de los primogénitos en la cual el Todopoderoso "pasaj" (salteó), las casas de las familias de Israel.

La participación en la conclusión de algún tratado de la Mishná o del Talmud, o la participación en algún evento festivo (Circuncisión, boda, o Seudat Mitzvá en general), interrumpe el ayuno.

"Asiá Melajá": Después del mediodía, no se debe trabajar a fin de consagrar todo el tiempo a la preparación de las Matzot y lo necesario para el Séder que se realizará esa misma noche.