Purim
Parashat Zajor www.mesilot.org yeshiva@mesilot.org
En el Shabat anterior a Purim, luego de la lectura habitual de la Torá,
se leen los versículos del libro de Devarim (25:17-19), en los
cuales se ordena el precepto bíblico de recordar el odio de Amalek
hacia nuestro pueblo:
"Recuerda lo que te hizo Amalek en el camino, a la salida de
Egipto; cómo te acometió sin temor de Di-s, matando a los
rezagados cuando ibas cansado y debilitado. Pero cuando el Eterno, tu
Di-s, te haga descansar de todos tus enemigos en el país que te
dió por heredad, borrarás la memoria de Amalek por debajo
del cielo. No lo olvides".
Taanit (Ayuno) de Esther
Tal como nos relata Meguilat Esther, en el mismo día en que el
pueblo de Israel debió ser aniquilado por sus enemigos, el 13 de
Adar, los judíos lograron su salvación venciendo al adversario.
Por esta razón se declaró este día de ayuno, en recuerdo
de la petición que hizo la reina Esther al pueblo para que ayunase
y suplicase a Di-s por la anulación de la malvada sentencia de
Hamán.
En el caso de que el 13 de Adar coincida con el Shabat, el ayuno se
adelanta al día jueves. Este ayuno no es obligatorio para las mujeres
embarazadas, ni para las madres que amamantan, y tampoco lo es para los
enfermos, aún si su enfermedad no reviste gravedad.
A pesar de la victoria, ayunamos para que cada año, a través
de las generaciones, recordemos que nuestros enemigos continúan
al acecho. Si bien vencimos en aquella ocasión, no tenemos asegurada
la victoria en combates venideros. Es por este motivo que la alegría
de Purim no puede ser completa, y debe estar precedida por un día de ayuno,
de reflexión y aflicción. Únicamente por medio de nuestras buenas
acciones y de nuestro arrepentimiento sincero conseguiremos vencer siempre a los que
intentan exterminarnos.